Últimamente he estado viajando mucho para ir a firmas de mi
libro: Barcelona, Alicante, Valladolid, Almería… De punta a punta de la
península, como quien dice. Y aún me quedan muchos viajes para hacer llegar “La
Marca del Guerrero” a tantos lectores como quieran disfrutar de ella, mi
próxima parada es en Mérida, y seguramente tras la Feria del Libro de Madrid
partiré a Asturias… en fin, muchos kilómetros.
Sin embargo, pronto voy a tener una cita bien cerca de casa.
No dudé mucho cuando me invitaron a hacer una presentación de mi novela en el
centro juvenil @nimarte. Se encuentra en la localidad donde vivo, San Fernando
de Henares. El día es perfecto: el 23 de Abril, día del libro. Y el lugar…
bueno, ¿qué decir del @nimarte? Era ese sitio donde yo pasaba tantas horas,
donde montaba mis partidas de rol y tuve la mesa de juego más estable hasta la
fecha. También donde asistía a conciertos y otras actividades y talleres
culturales.
Cuando pienso en el @nimarte no puedo evitar pensar
en música, amigos, dados, vampiros, largas tardes de juego y estudio (también
allí me preparé el examen por libre de la ESO), risas, “colegueo” con los
animadores, fiestas, arte… Sin duda, un buen lugar para estar.
Por no hablar de la gente. Era un festival social para
alguien que, como yo, es más bien de quedarse en casa y hablar con poquitas personas.
Un sitio donde sentirse a gusto con gente agradable. Rubén ¿recuerdas un día
que llegaste tarde a una partida y te castigué un rato sin jugar? Fui muy dura.
Kike, a ti te hice una partida a un jugador en un banco en la calle, con ese
Assamita tuyo que se hacía pasar por Gangrel ¿lo recuerdas?. Coral, me hizo
tanta ilusión encontrarme contigo y que me enseñaras el tatuaje... Irene, la
primera vez que tu hermana te trajo a una partida, creí que no arrancabas, pero
qué rápido mejoraste. Javi ¿recuerdas la movida que tuvimos una vez cuando
hiciste cierto símbolo con las piezas del “hundir la flota”? Todo olvidado.
Dani, aún me preocupo por ti, no deberías beber tanto. Ore, se te echa de
menos, eras el alma de toda fiesta. Y
así podría seguir con muchos más amigos y colegas. Supongo que para mí, el
@nimarte es la representación de la parte más calmada y pacífica de mi
juventud. Uno de los pocos sitios en los que la vida no se atrevía a darme
muchos palos.
Celebrar el día del libro allí va a ser muy grato, aunque un
punto nostálgico.
